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Movimiento Todos Unidos
Nota informativa
Tomando en cuenta la pésima situación económica, política, social y de
derechos humanos que sufre la inmensa mayoría de nuestro pueblo y los
pronósticos de que esta crisis general habrá de agravarse a corto y
mediano plazos, hemos decidido poner en términos de opinión pública una
propuesta de medidas para sacar a nuestro país de la grave crisis
presente y propiciar mayores espacios de bienestar, libertad y
prosperidad para todos los cubanos.
Estas propuestas no constituyen una simple enumeración de deseos sino la
base de una campaña permanente para movilizar a la opinión pública
nacional ante la necesidad de urgentes reformas.
A nombre de la Comisión de Relatoría de TODOS UNIDOS,
Vladimiro Roca
Portavoz a. i.
La Habana, 19 de diciembre de 2002
Cuba: Propuesta de Medidas para salir de la crisis
Los disidentes, opositores y defensores de derechos humanos, agrupados
en el movimiento TODOS UNIDOS, estamos luchando para alcanzar todas las
libertades civiles, políticas, económicas y culturales de todos los
cubanos para que nuestra Patria se convierta, con el esfuerzo de todos
sus hijos, en una nación con una economía fuerte y solvente que nos
garantice una vida decorosa y próspera sobre la base de nuestro trabajo,
gestión e iniciativas personales. Esta es la razón esencial por la cual
promovemos el Proyecto Várela como fundamento jurídico y político para
obtener, entre otros, los siguientes beneficios para todos los cubanos:
Aumentar progresivamente los salarios, jubilaciones y pensiones tomando
en cuenta el alto costo de la vida; puesto que, en la actualidad, los
mismos apenas alcanzan para sobrevivir.
Adoptar un programa para el fortalecimiento de la moneda nacional frente
a las divisas extranjeras, tomando en cuenta que, durante décadas, el
peso cubano tenía el mismo valor que el dólar de los Estados Unidos.
Rebaja de precios en las tiendas que venden en dólares de los productos
alimenticios, medicinas, ropa y zapatos, medios de aseo, efectos
eléctricos, etc. que son todos de primera necesidad y que se oferten con
la calidad requerida. Se eliminarán las enormes ganancias con que el
Estado confisca los ingresos de los cubanos de la isla y del exterior y
se aplicarán los precios internacionales.
Libre contratación de trabajadores en empresas cubanas o extranjeras,
sin condicionamientos políticos a los cubanos que laboren en firmas,
embajadas u otras entidades extranjeras y sin la intervención de
empresas contratadoras estatales, ya que esta última práctica viola
principios de la Organización Internacional del Trabajo suscritos por la
República de Cuba.
Hasta tanto se restablezca el poder adquisitivo del peso cubano, pago en
dólares de una parte del salario de los trabajadores de aquellos centros
que operan con dicha moneda (hoteles, tiendas, etc.) y de las empresas
cuyas producciones se venden en dólares, incluyendo a los tabacaleros,
azucareros, metalúrgicos, pesqueros, taxistas y de otras industrias y
sectores, así como a los profesionales, artistas y deportistas que
trabajan en el extranjero.
Eliminación del cobro en dólares de los servicios prestados por el
Estado a los ciudadanos (pasaporte, permiso de salida, carta de
invitación, certificados de defunción, de nacimiento y de notas, títulos,
etc.), así como de las llamadas de larga distancia de los cubanos al
extranjero y reducción de las tarifas.
Todos los cubanos serán libres de trabajar por cuenta propia en negocios,
empresas de nacionales o extranjeros y podrán ejercer sus oficios,
profesiones y habilidades sin interferencia del Estado.
El Estado garantizará y mejorará los servicios públicos de salud y
educación para todos, y, opcionalmente, los profesionales que lo deseen
podrán abrir consultorios privados para la prestación de servicios
médicos o estomatológicos, bufetes de abogados, notarías, oficinas de
proyectos o de cualquier otro servicio técnico.
Los trabajadores de oficios y artesanos podrán trabajar libremente en
sus habilidades, cobrar por ello directamente y crear todo tipo de
talleres, empresas y cooperativas.
Todos los artistas (músicos, cantantes, actores, bailarines, pintores,
escultores, etc.) así como los escritores podrán cobrar directamente por
sus obras o actuaciones sin necesidad de autorización o permiso del
Estado, ni tener que pagar a intermediarios estatales la mayor parte de
sus ganancias.
Todos los cubanos podrán emprender cualquier tipo de negocio privado (restaurantes,
cafeterías, fincas agrícolas, ganaderas o avícolas, industrias,
comercios, hoteles u hospedajes para nacionales o extranjeros, talleres,
negocios de transportación, etc. sin restricciones o impuestos
arbitrarios y confiscatorios por parte del Estado.
La propiedad de la vivienda se garantizará a sus actuales propietarios,
los cuales tendrán absoluta libertad para alquilar, arrendar, permutar o
vender su vivienda así como reformarla, rehabilitarla o mejorarla. Los
propietarios de terrenos (solares yermos) podrán venderlos o construir
libremente en los mismos.
Las propiedades agrícolas también podrán ser vendidas libremente y se
pondrá fin al monopolio estatal en la tenencia de la tierra, mediante la
venta o entrega en usufructo permanente de las amplias áreas que
permanecen sin cultivar o que se explotan de manera ineficiente.
Respeto de la voluntad de los propietarios de dejar estas propiedades en
herencia a quienes ellos dispongan.
Los pequeños agricultores, cooperativistas y miembros de las UBPC
tendrán plena libertad para realizar las actividades agropecuarias que
prefieran y vender sus producciones a quienes estimen conveniente, a los
precios que acuerden con los consumidores.
Incrementar la reparación y construcción de viviendas dada la gravedad
de la situación de la misma, utilizando mejor los recursos disponibles
mediante la participación de entidades públicas y privadas. Priorizar la
venta de materiales y medios de construcción a la población con precios
accesibles y financiamiento en condiciones preferenciales.
Estimular la creación de cooperativas autogestionadas e independientes
para la reparación y construcción de viviendas en las cuales los
ciudadanos podrán participar a través del aporte de recursos materiales,
financieros y/o de su trabajo.
Reconstruir y ampliar las redes nacionales de acueductos,
alcantarillados, comunicaciones, calles aceras, parques y carreteras.
Todo ciudadano podrá comprar o vender vehículos automotores sin
necesidad de autorización estatal.
Los dueños de autos y camiones podrán vender libremente los mismos y
dedicarlos al transporte de pasajeros y/o mercancías mediante el cobro
directo de tales servicios, lo cual ayudará a mejorar la difícil
situación del transporte publico. Se promoverá la venta de autos y
camiones por el Estado a particulares y cooperativas para dichos fines.
Todos los deportistas y entrenadores cubanos podrán practicar sus
especialidades deportivas profesionalmente, tanto en Cuba como en el
extranjero, pudiendo cobrar totalmente sus ingresos sin interferencia o
extorsión estatal y podrán salir libremente del país y regresar a la
Patria sin necesidad de anuencia política del gobierno de turno.
El Estado priorizará realmente los servicios a la población mediante sus
propias instituciones o a través de empresas privadas, cooperativas o
mutualistas, haciendo especial énfasis en los siguientes servicios:
Agua, gas y electricidad: cese de los apagones.
Normalización del transporte público
Suministro de medicinas, material quirúrgico, ropa de cama, medios de
higiene y otros recursos a las instalaciones hospitalarias.
Garantizar servicios de ambulancias las 24 horas en todos los hospitales
y policlínicos.
Garantizar el pleno funcionamiento de las escuelas, círculos infantiles
y tintorerías y lavanderías y alentar la apertura de nuevas
instalaciones.
Libertad para que todos los cubanos (tanto los de la isla como los
residentes en el exterior) puedan salir libremente de nuestro país y
regresar cada vez que lo deseen, sin necesidad de permiso por parte del
gobierno de turno ni tener que pagarle por ello.
Promover y facilitar el libre regreso y reinserción económica, política
y cultural de todos los cubanos residentes en el exterior que así lo
deseen.
Abolir de la legislación vigente el término de salida definitiva para
los nacionales y la draconiana medida de incautación de los bienes de
los que salgan a residir en el exterior.
Reconocimiento pleno de la ciudadanía de los cubanos residentes en el
exterior con todos los derechos que ello implica.
Posibilidad de acceso a Internet, a la televisión por cable y vía
satélite para todos los cubanos mediante el pago de una tarifa mensual
razonable y sin la necesidad de una autorización gubernamental.
Eliminación del servicio militar obligatorio, desmilitarización de la
sociedad y dotar a las instituciones armadas de las técnicas más
modernas, incluyendo medios de transporte y comunicaciones, a los fines
de garantizar la defensa nacional y el orden público sobre la base de
instituciones cada vez más profesionales.
Restablecimiento de los Institutos Pre-Universitarios en las ciudades.
La obligación de estudiar el bachillerato becado en el campo es una
forma más de hacerle la vida difícil a la familia cubana y someter a los
estudiantes a condiciones de internamiento poco favorables, al tiempo
que se les separa del medio familiar y sus valores.
Eliminación de la escuela al campo y del llamado "trabajo voluntario" de
los estudiantes secundarios y universitarios en labores agrícolas
durante el período escolar o en sus vacaciones, sin perjudicar el
principio de la necesaria relación entre la teoría y la práctica.
Libre elección de cualquier carrera universitaria sin discriminación por
motivos políticos, religiosos o preferencias sexuales. Abolición del
criterio discriminatorio de que "la universidad es para los
revolucionarios".
Despolitización de la enseñanza prohibiendo que la misma pueda ser
utilizada como instrumento de adoctrinamiento sectario y obligatorio,
dotándola de un contenido técnico, cívico y patriótico basado en las
tradiciones cubanas.
Liberación de todos los presos políticos debido a que han sido
condenados en violación de derechos humanos universalmente reconocidos.
Reforma de las condiciones de encarcelamiento en todas las prisiones
cubanas y centros de detención y eliminación del hacinamiento, la mala
alimentación, la falta de agua potable, medicinas y atención médica y
estomatológica especializadas, así como las golpizas y otros abusos y
humillaciones que sufren los presos y ubicación de todos ellos cerca de
sus familias.
Reforma del Código Penal para poner fin a la criminalización del
ejercicio de derechos civiles, políticos y económicos y para atemperar
las sanciones, siguiendo la tendencia internacional a disminuir las
mismas y que tengan un verdadero contenido reeducativo que ayude a la
reinserción social de los sancionados.
Concentrar el trabajo de la policía en la seguridad ciudadana y en la
lucha contra el crimen y prohibirle que obstaculice el trabajo por
cuenta propia así como la interpelación u hostigamiento a los jóvenes en
general y, en particular, a los jóvenes negros.
Protección efectiva a la vejez, sean o no jubilados o pensionados, pues
sus ingresos son insuficientes y es uno de los sectores más afectados
por la devaluación del peso cubano, los altos precios de los alimentos,
la escasez de medicinas y los deficientes servicios de salud, además de
otros.
Promover la formación de organizaciones sindicales libres, colegios
profesionales, asociaciones independientes de campesinos y otras
asociaciones gremiales y proteger el derecho de huelga.
Reconocimiento legal de las ONG que lo hayan solicitado y a las que lo
soliciten.
Proporcionar a la opinión pública informes detallados acerca de la
situación económica del país, incluyendo la deuda externa, los ingresos
en divisas, la ejecución de los Presupuestos del Estado, las Provincias
y los Municipios y otras informaciones de interés público.
Aceptar toda la ayuda internacional que se ofrezca a Cuba para aliviar
las dificultades de alimentación, sanitarias, de transporte y otros
servicios vitales para la población y asegurar a los donantes la
necesaria verificación del destino final de los donativos y la
asistencia técnica.
Poner en vigor una estricta legislación de protección del ambiente que
impida que el avance económico conduzca a la destrucción del sistema
ecológico. La prosperidad del turismo, la agricultura y otras
actividades depende de un entorno no contaminado.
Eliminación de las prohibiciones discriminatorias de los cubanos
referentes al acceso a los centros turísticos, hoteles y balnearios en
todo el territorio nacional.
Firmar, ratificar y respetar todos los pactos internacionales de
derechos humanos e incorporar a Cuba a la lucha activa contra el
terrorismo y el narcotráfico internacionales, así como a los procesos de
integración económica y política.
Garantizar la plena libertad religiosa y el acceso a los medios de
comunicación social de las instituciones religiosas.
La Habana, 17 de diciembre de 2002 (Festividad de san Lázaro).
Nota: Partiendo del principio de que toda obra humana es imperfecta, se
abre esta propuesta a consulta popular.
Fuente:
www.netforcuba.org
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