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Estados Unidos observa el primer
aniversario del arresto del disidente cubano doctor Oscar Elías Biscet.
Departamento de Estado de Estados Unidos
Oficina del Portavoz
5 de diciembre de 2003
A continuación una traducción extraoficial de la declaración de Ereli.
Declaración de J. Adam Erelli, viceportavoz.
Estados Unidos observa el primer aniversario del arresto del disidente
cubano doctor Oscar Elías Biscet, detenido el 6 de diciembre de 2002
junto con otros nueve miembros de su grupo opositor, por tratar de
organizar un evento en celebración del Día de los Derechos Humanos.
Pedimos nuevamente la liberación inmediata del doctor Biscet y de los
centenares de otros presos políticos en Cuba.
Como tantos otros miembros líderes de la naciente sociedad civil de
Cuba, el doctor Biscet ha sido objeto de hostigamiento y atropellos
sistemáticos por parte de la seguridad del estado cubano. Luego de haber
pasado tres años en prisión falsamente acusado de desorden público, fue
excarcelado hace un año, y luego arrestado otra vez. Permaneció detenido
hasta abril, cuando se lo acusó y juzgó junto con los 75 presos por
motivos de
conciencia, declarados culpables en los juicios teatrales llevados a
cabo por el régimen.
El verdadero "crimen" de Biscet fue tratar de enseñarles a otros acerca
de las prácticas internacionales de derechos humanos, en un país donde
tales derechos humanos son pasados por alto, como cuestión de rutina,
por el gobierno. Recientemente se lo obligó a pasar 21 días en una celda
de castigo por ayudar a presos comunes y otros presos políticos a exigir
el reconocimiento de sus derechos fundamentales. Aplaudimos la valentía
del doctor Biscet en una situación de desventaja abrumadora y extrema
adversidad.
Lamentablemente, del doctor Biscet sólo ha llegado a ser la primera
víctima de una de las represiones más severas que el régimen ha desatado
contra la sociedad civil desde el comienzo de la revolución. En marzo de
este año, otros 75 periodistas y bibliotecarios independientes y
defensores de los derechos humanos fueron arrestados, sometidos a
juicios ficticios y sentenciados a largas penas de prisión por ejercer
derechos
fundamentales, protegidos internacionalmente.
Expresamos nuestra admiración a la esposa y la familia del doctor Biscet
y a las familias de todos los presos políticos cubanos, por su valentía
en mantener al mundo al tanto de los sufrimientos de los activistas en
pro de la democracia en Cuba. Sus actividades, tales como la obtención
de miles de firmas en apoyo del Proyecto Varela, que pide un referéndum
sobre reformas políticas y económicas, demuestra la capacidad del pueblo
cubano de superar el temor y promover una transición pacífica a la
democracia.
(Distribuido por la Oficina de Programas de Información Internacional
del Departamento de Estado de Estados Unidos. Sitio en la Web: http://usinfo.state.gov/espanol)
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