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Piden que peloteros del exilio
representen a Cuba
Cuando aún Cuba guarda silencio oficial sobre su posible asistencia al
Clásico Mundial de Béisbol, las Grandes Ligas recibieron ayer una carta
que no viene precisamente de La Habana en torno a este polémico evento.
El congresista Lincoln Díaz-Balart pidió ayer al Comisionado de las
Ligas Mayores, Bud Selig, que retire su invitación al gobierno cubano y
que, en cambio, le permita a un equipo compuesto de jugadores exiliados
que represente a la Isla en la cita del orbe.
''El béisbol de Grandes Ligas debe apoyar el derecho de los jugadores a
competir en representación de sus países de origen, y no en
representación de tiranías que oprimen a sus países de origen'', explicó
Díaz-Balart en su misiva.
La carta del congresista es el último acto de un drama al cual todavía
no se le ve el final y que comenzará el 3 de marzo, si es que finalmente
el béisbol cubano decide asistir a la fase clasificatoria en Puerto
Rico.
Cuba, que ostenta los títulos olímpico y mundial, desterró el béisbol
profesional a principios de la década del 60 y considera traidores a
quienes intentan el sueño de las Grandes Ligas.
En opinión de Díaz-Balart, los jugadores cubanos que militan en los
distintos estratos de la pelota profesional son los verdaderos
guardianes de una tradición beisbolera que hinca sus raíces en más de un
siglo.
''Según tengo entendido, durante la temporada del 2005, había 22 cubanos
o cubanoamericanos en los equipos de Grandes Ligas y 62 en las Ligas
Menores'', afirmó el congresista republicano. ``Ciertamente, estos
muchachos pueden formar un equipo para competir en representación de su
país de origen''.
''Estoy seguro que muchos de estos jugadores se sentirían honrados de
representar a Cuba, y no a los verdugos del pueblo de Cuba en el Clásico
Mundial'', agregó Díaz-Balart.
Aunque es poco probable que esta iniciativa surta efecto en las Grandes
Ligas, varios jugadores consideran esta carta un primer paso inicial
para tomar en cuenta a quienes se encuentran en un limbo deportivo de
cara al torneo.
''Ojalá le hagan caso, porque los peloteros cubanos del exilio no
tenemos respaldo ninguno'', expresó el lanzador Eddy Oropeza. ``Sería
magnífico que las Grandes Ligas nos dejase formar un equipo. No conozco
a nadie que no quisiera estar en ese equipo''.
En principio, la Oficina del Comisionado se aferraría a la invitación a
Cuba, pues tiene interés en reunir a todas las naciones tradicionalmente
fuertes en la disciplina en este clásico que se celebrará por primera
vez.
Pero una negativa de las autoridades antillanas de última hora, o
cualquier otro problema burocrático, podría abrir las puertas a la
constitución de una escuadra con jugadores cubanos residentes en Estados
Unidos.
''Eso sería lo más hermoso que podría sucedernos a los cubanos del
exilio'', indicó Juan Iglesias, agente de varios jugadores, entre ellos
Liván Hernández y Alex Sánchez. ``Un equipo de peloteros cubanos de
Grandes Ligas recibiría un apoyo incondicional. Significaría que nuestra
bandera estaría en buenas manos. Sería un triunfo ya, antes de que se
lanzara la primera bola''
Fuente:
El Nuevo Herald
Diciembre 09, 2005
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