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Carta
abierta al Sr. Presidente George W. Bush.
Baltimore, 17 de agosto de 2004
Estimado amigo, Sr. Presidente George W. Bush.
Me decido a escribirle esta carta abierta, pues como hombres sinceros
que somos gustamos de compartir las verdades.
Estimado amigo, Sr. Presidente George W. Bush, en el comienzo de su
mandato, tuve el honor de recibir una invitación personal suya,
solicitándome aceptara trabajar con UD. como líder hispano en la tarea
de hacer de América un mejor lugar para todos, la parte que nos
corresponde cada día la tratamos de cumplir de la mejor manera y al
máximo de nuestras posibilidades.
Enseñar y dar a conocer las verdades actualmente es una tarea difícil,
pudiese decirse tarea de titanes, tenemos en contra a la izquierda
radical, tenemos en contra la mayoría de la prensa radial, escrita y
televisiva, pero lo que no tenemos en contra son las mentes de los
hombres buenos esperando oír esas verdades que necesitan para decidir su
voto y su gobierno, de allí la importancia de lograr hacer llegar el
mensaje de verdad a las mentes desinformadas y confundidas.
En el caso de los Estados Unidos, aunque de forma difícil, aún se logra
hacer llegar esa necesaria información, en el caso de nuestro desdichado
pueblo cubano, eso es imposible, una cruel y ya conocida
internacionalmente dictadura asentada por más de cuarenta y cinco años
convierte esa misión en nula. A lo que más temen las dictaduras, a lo
que más temen las izquierdas es al flujo normal de la información, pues
saben que en el instante mismo que se conoce la verdad, se quiere y se
lucha por la Libertad.
El pueblo cubano al igual que el pueblo norteamericano quiere vivir en
Libertad, quiere zafarse de sus cadenas, pero hay muchos factores que
imposibilitan esa tarea. Cuando la Crisis de Octubre, momento en el que
Castro no dudo en lanzar los proyectiles nucleares contra esta nación;
dos superpotencias de entonces, este gran país y la ex Unión Soviética,
suscribieron un convenio de no agresión a Cuba, Castro sólo fue
observador en ese pacto, pero el acuerdo en sí, cual cheque en blanco,
le dejo el camino abierto para sus fanfarronerías callejeras y para sus
conocidos alardes en contra de Estados Unidos, mismos que lo
convirtieron a los ojos de los desinformados en el valiente del barrio,
Castro sabe que amparado en ese tratado los Estados Unidos nunca le
agredirán.
Por otro lado, aunque la Unión Soviética ya no existe, y Cuba nunca
cumple ni respeta acuerdo internacional alguno, este país de leyes e
instituciones ha respetado ese acuerdo y ha coartado a los exiliados
cubanos del derecho supremo otorgado por dios, reconocido en la Carta
Magna de los Derechos Humanos del uso de las armas para defender el
sagrado derecho a vivir en Libertad. Los casi dos millones de cubanos
exiliados no podemos organizarnos y entrar luchando en Cuba, como mismo
lo hace este país o cualquier otro para defender su seguridad, su
libertad, su democracia, estamos condenados a una espera que ya
desespera. Estamos limitados y condenados a luchar en foros desiguales,
estamos condenados a luchar ante unas Naciones Unidas que favorece y
reconoce como legítima a la cruel dictadura cubana, estamos forzados a
librar una desigual batalla contra Castro y su camarilla.
Amargamente aceptamos ese reto, no vinimos a este país que nos abrió los
brazos a violar sus leyes, vivimos en democracia y bajo un estado de
derecho, podemos modificar las leyes y los reglamentos, usando estos
instrumentos hemos logrado mucho. Logramos que se implementen medidas en
contra de la dictadura, logramos leyes buenas para nuestra comunidad,
logramos reconocimiento como hombres que conocen y respetan el juego de
la democracia.
El uso de la aeronave trasmisora “Comando Solo” y reforzar las
trasmisiones de Radio y TV Martí son dentro de todas las medidas
recomendadas por la Comisión para una Cuba Libre las más efectivas, son
las que acabaran de una vez con el monopolio castrista de la
desinformación y por ende con la inescrupulosa dictadura cubana, ¿Qué
motiva entonces que estos acuerdos ya aprobados no se hagan cumplir? ¿Quiénes
están deteniendo esto? ¿Temen que Castro se atreva a derribar a “Comando
Sólo”?
No, Fidel Castro es un hombre cobarde que odia a su propio pueblo,
hechos y acciones lo han demostrado, un pueblo viviendo en la miseria y
sin futuro es su gran logro, un rufián como Castro que amenazó con sacar
a los estadounidenses de la Base Naval de Guantánamo en el año 2000 y
convenientemente lo olvido, será el mismo que olvidará que “Comando
Solo” le esta llevando la señal de esperanza al pueblo cubano. Castro no
derribará a “Comando Solo”, Castro nuevamente arremeterá contra los que
odia y desprecia: sus rehenes. Y en otra de sus acostumbradas campañas
gigantescas recogerá de cada hogar cubano los radios y los televisores.
Cuando el asalto al cuartel Moncada, Castro que estudió y se crió en la
zona se perdió, apareció a los pocos días bajo la sotana de un sacerdote
protector, cuando ya sus compañeros de hazaña estaban muertos o presos.
Sr. Presidente George W. Bush, es hora de cumplir con los acuerdos
tomados, le solicitamos formalmente que ordene se termine de implementar
la parte que atañe el vuelo de “Comando Solo”, acelere la caída del
fatídico régimen de la Habana, démosle paso a la información y con ello
a la democracia y la verdad.
Ahora se mueven muchas cartas y fichas, pues es periodo electoral en
este país, pero estimado amigo, Sr. Presidente, el pueblo de Cuba
necesita la libertad con republicanos o con demócratas.
Estimado amigo, Presidente George W. Bush, le deseamos salud y éxitos.
Ing. César L. Alarcón
Presidente del MCUD
Nota: Esta carta que hoy se hace
publica, fue enviada previamente a la Casa Blanca por los canales
correspondientes.
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